viernes, 30 de octubre de 2009

Episodio 91: Traje de Licra





Como dirían los Mojinos: Un, dos, tres, y.... esto iba a ser un post instrumental, pero no puedo callarme, yo tengo que hablar...

El otro día hubo un simulacro de evacuación en el edificio donde trabajo. No sé muy bien el motivo, ni a quién se le ocurrió. Pero el caso es que (y sin consultarme previamente) me han adscrito al grupo de emergencia que velará, en caso de producirse una evacuación, por el desalojo del edificio. Decir que La Ley obliga a realizar estos simulacros. Toda empresa tiene que contar con un plan de emergencias y formar los citados grupos. O eso dicen.

Tras varios contactos entre los que formamos dicho grupo decidimos comunicar en que semana se llevaría a cabo el simulacro. Pero no el día en que se iba realizar. Más que nada para que éste fuera más efectivo, se ajustara más a la realidad y detectar fallos. Del cañón de humo en que pensamos (como en las discotecas) para darle más realismo y dado que la empresa no quiso gastarse los cuartos, mejor no hablamos. Pero como ocurre en toda gran empresa, existe información que al final se filtra. No resultó tan TOP SECRET como pensaba. Había gente que lo sabía. Empecé a sospecharlo cuando el día del simulacro llegué al trabajo y alguien, no recuerdo bien quién (a primera hora no conozco ni a mi padre), me comentó:
-¿Qué, hoy hay juerguecita?. Dime la hora, pa no joderme el café.
Pero como ocurre en toda empresa, la información que se filtra no llega a todo el mundo. Hubo personal al que les dimos una buena sorpresa. Y un buen susto también.

El DÍA X y a primerísima hora de la mañana, tuvimos una reunión. Para organizar como debía producirse el desalojo y fijar la HORA H. La empecé mal debido a que no pude tomar café. Y no pude tomar café porque cuando entraba por la puerta de la cafetería vinieron a buscarme (como si fuera un niño pequeño que hay que llevar al colegio), comunicándome que habían llegado el resto de los miembros del equipo... ¿Diez minutos antes de lo pactado?. ¡Que se tomen un café!, dije. No, están en la Sala listos para comenzar.....
¿Listos para comenzar?. El proyector no funcionaba. 45 minutos más tarde iniciamos la reunión. Todo ese tiempo lo invertimos en la gratificante tarea que es tratar de arreglar el dichoso proyector. Para al final tener que celebrar la reunión todos apiñados en frente de la pantalla de un ordenador. Tos juntitos. Y sin café. Durante la reunión tratamos varios temas.
Comenzamos con esta idea: en principio, cada persona debe abandonar el edificio por si misma. ¡Deben de ser capaces de evacuar por si mismos! (cito textualmente). A mí, asin dicho, como que me suena mal. A la vez que me parece bien. Cada uno que evacue por sí mismo. Y si necesitan ayuda que acudan a San Evacuol, pensé. No estoy por la labor de ayudar a evacuar a nadie.
El desalojo debe producirse de un modo tranquilo, sin carreras ni empujones, de un modo ordenado pero rápido. Bueno eso te crees tú, me dije. Yo he visto desalojos que de tranquilos, sin carreras ni empujones, no tenían nada. Por tener tenían hasta leches, sangre e ingresados en hospitales. Algunos acababan con esta frase: ¡un desalojo, una okupación! Los de emergencia aunque, no os lo creáis, son parecidos a estos otros.

Mi misión, en caso de emergencia, es velar que la planta donde trabajo y la inmediatamente inferior sean desalojadas, indicando al personal las vías de evacuación. Debo comprobar que en las plantas no queda nadie, que ninguna persona se quede atrás, siendo el último (junto los demás compañeros adscritos en estas funciones) en abandonar el edificio. A mí, asin dicho, como que no me mola. Que en mi contrato no pone Superhéroe ni nada parecido, pensé. Si tengo que jugármela prefiero hacerlo siendo el hijo de Guillermo Tell. Y una pregunta, ¿por qué al pelota de Ramírez no le han incluido en los equipos de emergencia?. Éste es un "currito" como todos, pero gracias a su peloteo está mejor valorado que los demás. No sabe ni hacer la O con un canuto, pero tus superiores consideran que es una persona muy cualificada. Con él no existen normas establecidas. Normas que se saltarán a la torera, jodiendo y pasando por encima de más de uno. Y me dije: dado que el Infierno no existe, si éste se produjera,... yo por el Pelota Ramírez,... no me la juego. Si alguien tiene que arder en el Infierno,... que arda el Pelota Ramírez. ARDE CABRÓN!!!!! Chillé pa mis adentros, mientras a la cabeza me venían canciones de Marilyn Manson, Ozzy Osbourne y demás Satánicas Majestades del Rock. Es lo que tiene el rock, que a veces es satánico. O eso piensan algunos. De la Matanza de Texas también me vino alguna imagen. En ellas aparecía una motosierra y Pelota Ramírez. No cuento más.



PELOTA RAMÍREZ: dicese del tip@ más indignante, suci@ y rastrer@ de toda la Empresa. Dicese del tip@ que siempre está picoteando, cual gallina, alrededor de los jefes. Y jodiendo la pava entre los compañeros. Dicese del tip@ que suele estar escaquead@. Y al final te toca realizar su trabajo. Pero a todos los efectos, para lo bueno y para lo malo, el trabajo ha sido realizado por los dos: Pelota Ramírez y tu.

Continuamos la reunión contemplando videos educativos sobre situaciones de emergencia. Como incendios y alguna que otra catástrofe. Dimos instrucciones de qué debíamos hacer y que no.
El caso es que me dieron un brazalete reflectante y un silbato; utensilios que deberé utilizar y me ayudarán en caso de emergencia. ¿Y qué se supone que debo hacer con ellos?. ¿Arrojarlos contra el fuego a ver si apago las llamas?. El brazalete, según me explicaron, es para hacerme ver y el silbato para hacerme oír. Me dije: los llevaré siempre encima. A ver si así, de una puñetera vez, me hago notar en esta puta empresa. Cuando pregunté por el traje de licra se sorprendieron y tuve que aclararlo:
- Bueno, ¿qué es un superhéroe sin traje de licra?.





Vemos unos planos del edificio. Estudiamos las distintas vías de escape y fijamos el punto de encuentro. Recordamos que debemos informar de la situación al Jefe del Equipo, para que éste la transmita a los Equipos de Emergencia que vendrán a socorrernos (Bomberos, Policía, Sanitarios). Nos repartimos las plantas. Como suele ocurrir el que reparte se lleva la mejor parte. Como no lo hice yo me tocó lo peor. Aparte de mi planta y la inferior me adjudicaron también el sótano, donde está situado el archivo. Al principio no me hizo ninguna gracia. Qué cabrones !! pensé. Estos me mandan a quemarme a las profundidades de este infierno de empresa. Pero más tarde me agradó la idea de bajar a las profundidades del averno.

Decidimos fijar la hora. Para que me hicieran caso me puse el brazalete y toqué el silbato. Y funcionó. Me prometí a mi mismo no quitármelos jamás, ni pa dormir. Propuse realizarlo en media hora. Lo justo para tomar un café y ponernos a ello. Yo sin un café en el cuerpo no evacuo, fueron mis palabras exactas. Lo reconozco, asin dicho, como que sonó mal.

Habiendo fijado la HORA H nos despedimos, deseándonos batir la marca establecida el año pasado (donde yo no participé) y quedando en volver a vernos tras el simulacro. Para intercambiar impresiones.
Subí a la cafetería. Pedí un café (por finnnnnnnn!!!!!) y mientras me lo tomaba comenté al camarero que en 20 minutos dejara de servir a la clientela.
- Mas que nada para que no se te mosqueen, pues en 25 minutos desalojamos.
Continuamos hablando. Me comenta que Pelota Ramírez ha vuelto de vacaciones. Hace un rato estaba tomando café. También pregunta por el motivo de mi sonrisa. Nada, luego te veo. Cuando suba a comer.

A esas horas Pelota Ramírez suele bajar al archivo. A colocar. Bueno, eso es lo que él dice. La realidad es que Pelota Ramírez baja al archivo, se cierra con llave y se pone a leer el periódico. En el mejor de los casos hasta se echa un sueñecito. Y todo esto lo sé porque en ocasiones he bajado a buscar algo y me ha tocado aporrear la puerta durante un buen rato. Cuando por fin abre ,Pelota Ramírez aparece tras la puerta, medio despeinado, con los ojos hinchados y bostezando.
-Perdoooooooooooona. Estaba al fondo colocando.
-Me parece estupendo, pero tío llevo media hora aporreando la puerta
-No te oía, como estaba al fondo.
-Al fondo?.... Lo que tú digas.

Cinco minutos antes de la HORA H. Me encuentro en el sótano. Con el máximo sigilo meto la llave en la cerradura de la puerta del archivo, y... bingo. Está cerrada por dentro. Pelota Ramírez se encuentra en su interior. Y ahí no existe megafonía. Pero sí alarma. Decido dejarle encerrado y que sea lo que Dios quiera.
Subo rápidamente por las escaleras hasta la segunda planta. 30 segundos antes de la HORA H estoy listo para entrar en acción. Noto como la cafeína fluye por mis venas. Quieren un equipo de emergencia. Pues tendrán un equipo de emergencia. Quieren un héroe, pues tendrán un héroe.





A la HORA H comienza a sonar la alarma. Por la megafonía y tras escuchar cuatro veces seguidas un "Lo digo ya" , la Mari de la Vigilante de Seguridad comunica con una monótona , inexpresiva y casi inaudible voz el siguiente mensaje:
Atención. No se preocupen. Esto es un simulacro. Abandonen inmediatamente el edificio. Sigan las instrucciones del personal de emergencia. Háganlo de manera ordenada. No se paren a recoger nada. No utilicen los ascensores......
Mientras me coloco el brazalete y me cuelgo el silbato pienso en lo que dice el mensaje. "No se preocupen",... ¿pero se puede empezar así?. Por Dios. Que está sonando la alarma. Y algo más de entusiasmo. Que no trasmite nada. Pienso que si quieres realismo lo que necesitas es una desgarradora voz gritando !!!!FUEEEEEEEEGGOOOOOOOOO¡¡¡¡ ¡¡¡¡SALVESE QUIEN PUEDAAAAAAGGGGRRRRR!!!! Pienso que a veces me como cada marrón. Pienso que debería cambiarme el nombre por Oskitar Marrón. Pienso que estoy ante el mejor papel de mi vida. Pienso que esto es un papelón. Pienso ....que pienso muchas cosas. Y muchas, estúpidas.

Irrumpo en la segunda planta tocando un pito, cual arbitro de fútbol. Les expulso del terreno de juego rogándoles que abandonen el edificio. Pero sin mostrar tarjetas. Ni rojas ni amarillas.,ni de ningún otro color. Y porque no me las han dado. Si me las dan y el guión dijera que debo mostrarlas, las mostraría. Pero el guión dice que debo mostrarles las vías de evacuación. Y eso es lo que hago. Ante mi sorpresa los jugadores acatan las ordenes sin protestar. Hay quien incluso logra oir la megafonía. Y hacer lo que dice, no parándose en recoger sus objetos personales. En cuestión de minuto y medio tengo desalojada la segunda planta.
Bajo por la escaleras interiores y accedo a la primera planta del mismo modo que lo hice en la segunda. Soplando como un poseso por un silbato. Observo a un par de personas saliendo por la puerta del fondo. Ante mi asombro la planta ha sido desalojada. Han sido capaces de evacuar por si mismos. Eso me anima, me alegra y llevado por la emoción me acerco el silbato a la boca y me permito el lujo de tocar un poquito de lo que yo creo que era una samba o cualquier otro ritmo brasileño. Y hasta la bailo. Porque yo lo valgo. En cuestión de segundos compruebo que no hay nadie.
Bajando por las escaleras me cruzo con toda la gente que está bajando por las mismas, tratando de salir del edificio. Delante mío tengo al Director de Loquesea. Ha parado a la Subdirectora para ponerse a charlar con ella. Momento que aprovecho para tomar todo el aire que puedo en mis pulmones y pegarle un soberano pitido en toda la oreja. Pega un brinco y llevándose la mano al oído me dirige una asesina mirada. Antes de que me diga algo me adelanto a él. Increpándole su postura le digo que está obstruyendo el camino. Le ruego continúe con la evacuación. Va a decirme algo, pero me vuelvo a adelantar. Vuelvo a tocar el silbato y le suelto un:
- Por favor, que no tenemos todo el día.!!!! . Circule.
Continuamos bajando mientras la Subdirectora me dirige una sonrisa. Una sonrisa que dice:
- Le está bien empleado. Y de la que me has librado.
Al llegar a la planta baja continúo mi camino hacia el sótano. Según me voy acercando los gritos de Pelota Ramírez se hacen más sonoros. Los golpes también. El pobre desgraciado está solicitando socorro. Cuando llego a la puerta miro el reloj. Han pasado tres minutos desde que comenzó la evacuación. Lleva tres minutos gritando y pataleando como un poseso. De ahí que comience a quedarse ronco. Mientras toco el pito le grito que esté tranquilo, que no pasa nada. Le pregunto quién es.
- ¡Pelota, Pelota Ramírez!, me grita.
- Pelota Ramírez, tranquilo. Como te he dicho no pasa nada.
- No te creo, está sonando la alarma y lo que he podido escuchar por megafonía decía algo de evacuar el edificio. SACAMEEEEEE¡¡¡¡, grita. Pero de modo histérico, créanme.
- Te has encerrado por dentro y no puedes salir. Tranquilízate y abre.
- LO INTENTO PERO NO SE ABRE,.... quién eres,,, QUIÉN ERES¡¡¡¡¡.
- Soy Oskar.
- OSCARRRRRRRR. tío sácame de aquí¡¡¡¡¡ , grita mientras da patadas a la puerta.
-Vamos a ver. Te voy sacar, pero tranquilízate. Es un simulacro. Trata de abrir.
- NO PUEDOOOOO¡¡¡¡¡ SACAME¡¡¡¡. Repite una y otra vez.
Pero serás tonto del culo, pienso, mientras se me escapa la risa.
-Tranquilo, voy a buscar las llaves.
-NO ME DEJEEEEES
- Tardo un minuto.

Finjo marcharme mientras Pelota Ramírez continúa gritando socorro. Y trato de contener la risa.
Un minuto más tarde le grito que estoy de vuelta.

- ABREME TIOOOOO¡¡¡¡¡¡, grita de manera desconsolada.

Abro la puerta. Un desencajado y sudoroso Pelota Ramírez se me tira al cuello. Entre sollozos y gritos me da las gracias. Observo que ha perdido los papeles. Le cuesta respirar y por más que trato de tranquilizarle y explicarle que se trata de un simulacro, no hay modo alguno de que se lo crea. Piensa que el edificio está en llamas. Echa a correr gritando, tropieza y cae, de un modo grotesco, al suelo.
En ese momento, cogiéndole de la pechera y al grito de !Sé un hombre Pelota Ramírez!, le solté un bofetón en su carrillo derecho. Sentí el impulso de volver a atizarle en el otro carrillo. Cosa que hice utilizando la misma expresión de "Se un hombre Pelota Ramírez" . Se quedó mudo. Observándome con los ojos abiertos como platos. Durante unos segundos lo único que se oía era la sirena.

-Tranquilízate, guarda las formas. Es un simulacro. Lo entiendes.
- Si.
-Los nervios te han jugado una mala pasada. Por eso no conseguías abrir la puerta; y los mismos nervios te han llevado a no utilizar la Salida de emergencia.
-¿Qué salida de emergencia?.
-La que está situada al fondo del archivo, donde tanto te gusta colocar. Me extraña que no la conozcas. Está debajo de un cartel que pone "Salida de emergencia".
-Ah!!!, esa puerta
-Sí, esa puerta Pelota Ramírez. ¿Te encuentras mejor?¿Más tranquilo?
-Sí. Gracias tío. Si no es por tí hago el ridículo más espantoso.
-Pues vamonos. Me parece que nos vas a joder el record.

Llegamos los últimos al punto de encuentro. Le dejé medio sentado-medio tumbado en la acera. Nos preguntaron por el retraso. Y qué le pasaba a Pelota Ramírez. ¿Por qué tiene los carrillos tan rojos?, comentó uno. Comuniqué la completa evacuación de mis plantas asignadas. De lo demás ya hablaríamos. Todo el mundo se agolpaba alrededor de él, preguntándole por su mala cara. Le dejé inventando excusas sobre lo ocurrido.

Más tarde, al cambio de impresiones entre nosotros se unió toda la Plana Mayor. Quienes andan muy preocupados por la seguridad. Y por saber lo ocurrido con Pelota Ramírez. Me entero que la marca anterior ha sido mejorada. Tenemos nuevo record. Pero teníamos cuatro fallecidos. En uno de los despachos de la planta baja se encontraron con cuatro personas que no habían abandonado el edificio. Cinco muertos sentencié yo:

-Pelota Ramírez se había encerrado en el archivo. Al sonar la alarma y no poder escuchar el mensaje por megafonía, dado que el archivo carece de ella, pensó que era real. Con los nervios fue incapaz de abrir la puerta. Del mismo modo que desconocía la existencia de la Salida de Emergencía situada al fondo del archivo. Y todo esto me hace pensar en la petición de instalar la megafonía en el archivo y que ha sido desatendida. Por un simple simulacro un empleado ha sufrido un ataque de nervios. Y todo por no disponer de medios adecuados. Menos mal que estaba yo aquí para aplicarle los primeros auxilios. Segundo, habrá que sensibilizar al personal con que no pueden encerrarse en los sitios así como así. No son conscientes del peligro que pueden correr. Del mismo modo que no se pueden parar en mitad de las escaleras obstaculizando las mismas. Sr. Director de Loquesea: la próxima vez le ruego colaboración. Indudablemente habrá que señalizar mejor esa Salida de Emergencia que nadie ve. Para finalizar, en un caso real no se si estaríamos hablando de una victima más. Si hemos establecido nueva marca, a lo mejor lo que tenemos es un rescate y una muy buena actuación y coordinación del Equipo de Emergencia. Besarme el culo (pensé).

Buen trabajo Oskar, dijo la Dirección, mientras una alarma comenzó a sonar. Pi-pi, pi-pi,pi-pi,....

-NOOOOOO¡¡¡¡. EL DESPERTADOR NOOOOOO!!!!, grité. Porque?. Y hoy me toca simulacro.

Tras chuparme un atasco monumental llego al trabajo. Dispongo de 10 minutos para tomarme un café. Nada más entrar por la puerta de la cafetería vienen a buscarme, comunicandome que habían llegado el resto de los miembros del equipo.....
-Coño, juraría que esto es un Déja Vu de esos.
Decidí tomarme un café rapido y bajar a la reunión.


La teoría está muy bien, pero en la práctica, cuando tienes que desalojar un edificio por una emergencia real... pues como que la historia cambia. Y sé lo que me digo. En situación real ni somos profesionales ni estamos preparados para ello. Y me incluyo. Decir que el simulacro real fue bien. Desalojamos en un tiempo muy bueno. Y viene bien para refrescar cuatro conceptos de sugridad. Después me fui a casa, a ver si apagaba otros incendios o echaba más leña al fuego, con el sabor de haber realizado bien el trabajo para el me pagaron ese día. Si tengo que tirarme la mañana jugando a ser un héroe, pues me la tiro. O jugando a catástrofes. O jugando a bomberos, o jugando .....como prefieran decirlo. (ja, ja)



Banda sonora:

- Into the fire. Deep Purple, de su álbum In Rock. (1970) Primer disco que me compré de esta banda. El segundo que adquirí fue el Made in Japan. Los Mojinos Escozios versionaron esta canción bajo el título de Me cago en el cura
- Kickapoo. Tenacious D. De su álbum The Pick of Destiny (BSO, 2006). Lo que me rio con estos tíos.
- Firestarter. The Prodigy, de su álbum The Fat of the Land (1997). Para mi, el mejor.
- Out of the Frying Pan (And Into the Fire). Jim Steinman, de su álbum Bad for good (1981). Meat Loaf tambíen incluyo esta canción es su álbum Bat Out of Hell II. El amigo Jim compusó y produjó varios LPs para Meat Loaf.


Claro que también podrían haber sonado muchas otras: Highway to hell de AC/DC, Light my fire de The Doors, Fire de Jimmy Hendrix, y un largo muy largo etc.

Nota: Para todo lo contado solo puedo decir un "vayan ustedes a saber". Remitiros al Episodio Piloto donde avisé que todo parecido con la realidad no es coincidencia. Es imaginación vuestra. Y Pelota Ramírez, aún siendo ficticio, digo yo que existirá en alguna empresa. Por último ruego a todos los Ramírez me perdonen por utilizar su noble apellido en tan vil personaje. Para acabar y por si le preocupa a algún compañero de trabajo que pudiera leer esto, en el archivo sí existe megafonía.




7 comentarios:

  1. el video de tenacious D es genial!!!!habia oido la cancion en SNL,pero el video no lo habia visto...MOLA!!

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  2. Acabo de descubrir la vena literaria del callejón.Deberías publicarlo en el marcapáginas como relato humorístico-de ciencia ficción(Jua, jua...)Muy apropiada la banda sonora. Una pregunta... Seguro que no fue real? ( menos mal que trabajo en el turno de tarde).

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  3. Continuación...
    Últimamete voy mucho por esa zona del archivo... y mi apellido termina en z ARGHHHH.. seré yo el pelota????

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  4. No le busque usted tres pies al gato. O mejor todavía, no arroje más leña al fuego....cuando no existe llama (já,ja)

    Aunque su apellido acabe en Z creo que no hace falta decirle que es usted mucho más noble, mejor compañero y "enrollao" que este personaje de sueño o pesadilla, pero real como la vida misma, llamado Pelota Ramírez.

    En cuanto al marcapáginas....ya te lo contaré "in person", tomando café y acompañado de unas risas

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  5. ¡Vaya! Hoy toca el humor negro.

    Esta vez te has superado; como dicen por ahí arriba, un relato de ficción y de intriga, aunque es como esas películas "tramposas" en las que ocurren muchas cosas increibles, y un minuto antes de terminar la película... el protagonista se despierta. Cagüen la mar!!!

    Yo viví la evacuación y... todo el mundo sabía el día y la hora exacta; todos estábamos preparados con el abrigo y el bolso en el hombro. Algunos de la séptima planta, se refugiaron en los despachos de la tercera o segunda, mientras se podían utilizar los ascensores, para no bajar todas las escaleras de un tirón.
    Una cosa del relato es cierta: la gente bajaba charlando tranquilamente.

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  6. Se me olvidaba: Enhorabuena por el título "Traje de licra". Es buenísimo.

    Haz el favor de hacer copia de seguridad del blog. Este "cuento" no se pu'e perder.

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  7. Me alegro que le guste Srta Porverita. Ya la enseñaré el Traje de Licra tan mono que me he comprado para estas ocasiones. Pq traje para los domingos no tendré,pero de licra para evacuaciones tengo dos (de quita y pon).
    Anda, me acabo de enterar del "peazo" puente que se me ha cogido. Páselo usted bien.
    Y el concierto ¿que tal?.
    Un abrazo.

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